Yami y el espiritu maligno de la sortija del milenio mantienen un duelo en el reino de las sombras, mientras que las almas de Yugi y los demas son usadas en el duelo como el monstruo favorito de cada uno. Bakura logra interponerse contra el espiritu de la sortija y permite a Yami derrotarlo y enviar al espiritu al cementerio.